El temido post verano

Cuando terminan las vacaciones, debería comenzar el descanso para el cabello y el cuero cabelludo. Sobre todo, porque en esos últimos días del año – más allá de calendarios, el año comienza “en serio” con el regreso a las tareas habituales – la fibra capilar está expuesta a una bomba concentrada de agentes agresivos, que padece con mucha más intensidad en los días de veraneo.

Cuando termina el verano no es raro que el salón se convierta en una enfermería del cabello y del cuero cabelludo. Y será más que conveniente que el profesional esté preparado para abrir un menú de emergencias con tratamientos precisos e intensivos que les devuelvan el equilibrio y en consecuencia, la salud y belleza al cabello de su clientela.

Signos

Para identificar a un cabello post verano los especialistas priorizan los niveles de deshidratación y desnutrición. Porque la incidencia de los rayos UV sobre la cutícula capilar hace que se reseque y abra. Esto propicia la pérdida de la hidratación.
Algo esencial para la hebra. Muchas personas suelen pensar que esta pérdida de líquidos se compensa con que el pelo, en este tiempo, se moja mucho más que lo habitual. Pero no, porque la hidratación exterior no penetra tanto en la fibra, sobre todo si ésta tiene coloración agregada. Pero también porque el agua desde el exterior transporta otros agentes nocivos.
Uno de estos agentes es el cloro, elemento que este año se ha utilizado con más intensidad. Pero, de manera contraria a lo que se suele pensar, no es el más perjudicial, porque también están los agentes naturales, entre ellos el sol -cada vez más potente por el calentamiento global.- y la sal marina. Por supuesto que a esto se le suma el uso intensivo de secadores y planchitas ya que la idea es salir y disfrutar y no esperar o realizarse peinados muy rebuscados. Por algo son vacaciones.

Aunque no lo veamos…

Pero, como ya se mencionó al principio, son la mente y el cuerpo los que disfrutan de las vacaciones y no el cabello y la piel. Un caso especial es el pelo con coloración ya que se trata de una fibra alterada que se abre cuando está expuesta a los agentes típicos del verano. Y es aquí donde se produce esa decoloración o barrido de color o, lo que es peor, el viraje cromático que puede hacer devenir a un rubio en un tono más verdoso y a un caoba a algo más parecido al violeta.

En estos casos, es el sol el principal responsable de estos cambios. La radiación solar, junto con el oxígeno, producen la oxidación de los gránulos de melanina en la zona de la corteza del pelo. Esto provoca en los cabellos de color natural que se puedan aclarar, lo conocido como reflejos naturales, inspiración de las llamadas mechas californianas o de los colores barridos.

Incluso los cabellos canos pueden sufrir cambios de coloración derivados de la exposición solar ya que pueden adquirir un tinte amarillento cuanto más prolongada e intensa es la exposición solar.

¿Claro como el agua?

Elemento esencial para todo el organismo, el agua no es igual en todos los lugares. Más allá de las salinidades y de los agregados de cloro, el agua siempre lleva minerales disueltos y compuestos inorgánicos lo que definen su calidad, su transparencia, sus propiedades, su potabilidad y su dureza.

¿Cómo se mide la dureza del agua?

Por la magnitud de sales de magnesio y calcio. Esto, más allá de los procedimientos de potabilización, depende de la fuente de donde se toma el agua. Por ejemplo, si se obtiene del mar será muy dura ya que contiene muchos minerales, algo común en zonas costeras o islas. En estos casos suele suceder durante las vacaciones en localidades costeras que el champú no haga casi espuma.
Esto es porque las sales de calcio y magnesio precipitan.
Además, pueden dejar residuos en el pelo que les quita brillo y sedocidad.
¡Y en el cuero cabelludo? No solo el pelo sufre, por ejemplo, la agresión de los rayos UV.
También lo padece el cuero cabelludo. En especial, cuando se trata de personas con cabello fino u hombres y mujeres con cabello muy corto. Y, por supuesto, la deshidratación también hace lo suyo.

Shock humectante

Vanesa Miechenko/ OPCION

El cabello de nuestras clientas vuelve del verano opaco y quebradizo. Por eso, necesita un shock de tratamiento a base de pantenol, vitamina E y queratina. Es la manera de rehidratar la fibra y humectarla. Pero también construirle una barrera que mantenga ese nivel de humectación.
En cuanto al cuero cabelludo, lo ideal es utilizar productos con filtro UV, tanto durante el verano como en las primeras semanas post vacaciones. Esto se complementa con champúes hidratantes.
Es importante que tanto el cuero cabelludo como el pelo descansen. Para ello hay que posponer decoloraciones y evitar usos excesivos de secador y planchita.

Alquimias

Gastón Fidelbo/ OSSONO

Ante un cabello quebradizo y opaco recomendamos aceite de argán virgen porque quita las partículas de salitre, yodo u otros elementos residuales que también generan discromías capilares o viraje del color. Ante esto, el profesional debe nutrir e hidratar para que el color se vea como corregido.
Desde Ossono trabajamos la alquimia de argán o de queratina -según sea el caso- compuesta por champú y una máscara potenciada conloción de argán. Todo esto aplicado de medios a puntas sin tocar las raíces.
El cierre del tratamiento se realiza con Oro Líquido para sellar puntas y mantener la luminosidad

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