¿Lavar o no lavar?  

Si se utiliza el shampoo adecuado, el cabello puede lavarse de manera diaria. Sin embargo, no es recomendable hacerlo más de una vez al día, aunque se haya hecho actividad física. Un lavado excesivo barre con el sebo natural del cuero cabelludo y lo reseca.  

Una opción es recurrir al shampoo en seco. Lo importante es esperar a que la transpiración se seque y no aplicarlo inmediatamente después de ejercitarse, porque si no el producto se adhiere y se apelmaza.  

Decile no al sulfato  

Si no lavarse el cabello no es una opción, se puede enjuagar simplemente con agua o, también, utilizar un shampoo natural y libre de sulfatos.  

Recordar, siempre, aplicar aceites capilares y acondicionadores para mantener el pelo nutrido y sano.  

Trenzas de victoria  

Recoger el pelo de una manera prolija y segura evita que se ensucie, no solo con transpiración sino por el contacto que puede tener con otras superficies. Las trenzas de boxeadora, las cosidas y los accesorios nos pueden ayudar en esta tarea además de que, obvio, se ven bien.  

El tipo de actividad 

Qué clase de ejercicio hacemos y cuánto transpiramos son factores a tener en cuenta. Pero hay que prestar especial atención si realizamos deportes en el agua. Por un lado, la sal del mar reseca nuestro cabello por lo que es importante utilizar productos hidratantes y nutritivos. Por el otro, el cloro de la pileta altera los pigmentos, sea pelo natural o teñido. Un shampoo protector de color es ideal para estas ocasiones.  

En ambos casos, se recomienda enjuagar el pelo con agua dulce para evitar que esté demasiado tiempo en contacto con estos componentes.

Fuente: ComunicaHair